...Mientras qe esa voz particular en mi (algunos le dirán conciencia.. yo lo llamo mi Cruz) me decía: "Dale, cortalo como una de esas gargantas de tus sueños". Me giré de improviso y grité algo sin coherencia, hata qe recorde "estoy solo en al cocina".
Tomé el tarro con sangre y me dirigí a mi sala de estar buscando algo de sal negra, se la heché al recipiente y parti para mi cuarto donde Él me aguardaba -Puedo ayudarte- empezó a decir pero no qice qe lo haga.. -Tengo todo el control qe qiero sobre mis voces- y le tiré la mezcla negrusca en su 'cara'.
Se evaporo ante mi con un humo de colores indescriptiblemente perversos para dar lugar a la carne mas tentadora qe jamas haya videado. Avanzo como si el suele fuera ajeno a Éso, me beso y se fue por las sombras de mi puerta.
Comprendi entonces qe ya no volvería... Hasta qe lo buscara.
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Voy caminando por un pasillo en el cual se encuentran muchas, muchísimas puertas. Yo solo quiero llegar a la del fondo, pero no se cual es con tantas puertas adelante, no logro visualizar ese fondo. Busco, busco porque quiero encontrar.
ResponderEliminarEn un momento dado me detengo y observo una puerta un tanto vieja y con la letra F. Claro !-dije- Y sin dudarlo entre. Luego de un tiempo me empece a dar cuenta que el camino que recorrí y la puerta que decidí abrir no era la puerta a la que quería llegar, pero al relacionar varias cosas que me hicieron pensar en ello, elegí.
Yo creo que hay muchas salidas, el tema es saber cual elegir.